VIOLENCIA SEXUAL (Libros de la SEP preescolar)

Violencia: Acción ejercida contra el natural modo de proceder. Fuerza ejercida sobre una persona para hacer lo que no quiere.

Código penal federal en el artículo 260. Comete el delito de abuso sexual quien ejecute en una persona, sin su consentimiento, o la obligue a ejecutar para sí o en otra persona, actos sexuales sin el propósito de llegar a la cópula. A quien cometa este delito, se le impondrá pena de seis a diez años de prisión y hasta doscientos días multa. Para efectos de este artículo se entiende por actos sexuales los tocamientos o manoseos corporales obscenos, o los que representen actos explícitamente sexuales u obliguen a la víctima a representarlos. También se considera abuso sexual cuando se obligue a la víctima a observar un acto sexual, o a exhibir su cuerpo sin su consentimiento. Si se hiciera uso de violencia, física o psicológica, la pena se aumentará en una mitad más en su mínimo y máximo.

El Catecismo de la Iglesia Católica en el número 2356, La violación es forzar o agredir con violencia la intimidad sexual de una persona. atenta contra la justicia y la caridad. La violación lesiona profundamente el derecho de cada uno al respeto, a la libertad, a la integridad física y moral. Produce un daño grave que puede marcar a la víctima para toda la vida. Es siempre un acto intrínsecamente malo. Más grave todavía es la violación cometida por los padres o educadores con los niños que les están confiados.

Una vez aclarado lo que es la violencia sexual, continúo con el manual para la educadora y el educador a nivel preescolar.

Justifican la plena autoridad en la educación sexual a los alumnos de preescolar dado que la violencia es un problema mundial de salud pública fundamental y de crecimiento.

"Los educadores y educadoras deben asumir la educación y prevención de la violencia" y por ello pueden decidir la forma y el contenido que les convenga a sus intereses sin informar del todo a los padres de familia, quienes son los últimos en darse cuenta de los contenidos de los libros, manuales y guías de los maestros, hasta que sus hijos comentan algo en casa es cuando se dan cuenta y quieren intentar hacer algo, cuando ya es demasiado tarde.

Dentro de los factores de riesgo que marca dicho manual (en la página 14) nos habla de drogas, falta de disciplina, falta de supervisión, trastornos de personalidad, medios de comunicación que promueven la violencia, con todos ellos estoy de acuerdo pero unos de los que me llaman la atención son los siguientes: familias numerosas, dificultades económicas, hiperactividad... será que nos continúan infiltrando la planeación familiar sutilmente.

Comparto totalmente que uno de los grandes obstáculos que encontramos para detener la violencia, es no denunciar como se requiere. Dentro de las familias pero también dentro de las escuelas.

A consultoría me llegan con frecuencia personas que han sido violadas por un familiar, un vecino o un maestro y en la mayoría de los casos no fue denunciado el delito, por vergüenza, por falta de información o por miedo y viven con el dolor por años sin saber en qué momento hablarlo, con quién y la forma de abordarlo. Algunas personas repiten el patrón de víctimas sin denuncia hasta por tres generaciones.

Hay una tolerancia impresionante a la violencia, es más fuerte el miedo a las consecuencias del agresor que el volver a vivir la agresión o s soportar el dolor.

¿Cómo contrarrestar esta situación?  Es más sencillo de lo que nos imaginamos.

1.- Enseña a tus hijos a reflexionar, hazles preguntas, ¿Te gusta? ¿cómo te sientes? ¿qué tienes? ¿quienes son tus mejores amigos? ¿a qué jugaste hoy en la escuela? ¿qué aprendiste?

2.- Vigila

3.- Contesta todas sus preguntas de una forma sencilla y concreta, sin tanta explicación.

4.- Convive lo más que puedas con ellos. Bicicleta, patines, resorte, escondidas, juegos de mesa, etc.

5.- Usa tu sentido común.

6.- Infórmate de lo que ocurre en la escuela, revisa los libros, pide citas con la maestra en forma periódica.

7.- No permitas que personas ajenas los bañen o los lleven al baño.

8.- Diles a tus hijos qué partes del cuerpo son públicas (manos, pies, cara, etc.) qué partes son privadas (las que se cubren con ropa interior), qué partes pueden tocar los demás y qué partes solamente las puede tocar por higiene. Al igual muestrale que tipo de caricias son normales y cuáles no. 

9.- Revisa el tipo de contenido que tienen las caricaturas que ve.

10.- Fomenta la confianza a tal grado que te pueda comentar y preguntar todo lo que le suceda.

11.- Infórmate y fórmate (cursos en tu parroquia, buenas lecturas, buenos programas, conferencias, oración, oración, oración).

12.- Enséñales a tus hijos que cuentan con sus papás para lo que sea necesario y que la Virgen María los proteja y su ángel de la guarda lo acompaña.

Los padres de familia tienen la responsabilidad de educar en el amor y para el amor, hablar de sexualidad es hablar de toda la persona, así que cuando hablamos de violación o abuso sexual hablamos de abuso en toda su persona no solamente en la parte física sino también en la espiritual.

Como podrán darse cuenta nada es novedad, simplemente estamos distraídos con falsas necesidades buscando un mejor estilo de vida, tratando de elevar la autoestima propia y la de mi familia, cuando lo más importante es "estar, convivir, compartir" entender de dónde venimos (de Dios) y adónde vamos (a Dios) y quién es el camino a la felicidad (Dios). Somos seres trascendentes creados por un Padre amoroso, que está lleno de misericordia esperando a que le pidamos ayuda. Hechos para ser felices desde hoy.  

Te invito a asumir tu responsabilidad con amor pero también a disfrutarla, es un privilegio ser padres aprovéchalo, agradécelo, y asúmelo.

Sandra Lillingston